Por delante uno que no moleste

Uno de los personajes más significativos que se dan en el curioso mundillo de la tauromaquia es el del torero que abre carteles "porque no molesta". Razón no les falta a los apoderados, representantes, asesores artísticos, consejeros, adjuntos y demás ralea que acompaña y aconseja a las figuras de la tauromaquia, que exigen siempre uno de esos "por delante".

La figura del torero que no molesta se hace aún más necesaria siempre que se da una rivalidad real o fingida (sobre todo en este último caso) entre dos toreros, que deciden llevarse las taquillas crudas durante una temporada. En este caso es fundamental contar con "el de por delante que no moleste", precisamente para eso, para ocupar un puesto y no molestar y no arruinar la estrategia económica de los dos rivales.

Se pueden distinguir al menos tres categorías del torero "delantero", si me permitís utilizar esa expresión para referirme a él.

1) El torero veterano, a ser posible con connotaciones artísticas, que en otro tiempo fue, pero que obviamente está ya pensando más en "arrebañar" los ultimos cuartos para la jubilación que en jugarse la barriga o en naturales de alhelí. Al aficionado en general, que recuerda con benevolencia las buenas tardes que este torero le dio hace ya unos cuantos lustros y que suele ser consciente de la necesidades económicas del susodicho, no le parece mal su inclusión en estos carteles, aunque al publico de aluvión le huele la jugada un poco a cuerno quemado. Ejemplo de este tipo de delantero podría ser Ortega Cano en sus ultimas temporadas (¿y en la que viene?)

2) El torero que fue pero ya no está ni se le espera (o que nunca fue y sigue sin estar ni se le espera), pero con cierto tirón mediático como consecuencia de sus triunfos en el tálamo o su planta y buena facha. Si a esto le añadimos, a ser posible, unos rimbombantes apellidos de dinastía uno puede, mediante esta posición de delantero, cimentar su carrera vital y profesional en la tauromaquia y ganarse sus buenos dineros temporada tras temporada sin haber triunfado nunca en una plaza de responsabilidad.

3) Agotadas las dos primeras opciones, se puede buscar para el puesto de delantero a un joven novillero de la tierra al que se le ofrece tomar la alternativa de manos de los toreros de sus sueños y encima con una ganadería de "las que embisten", a cambio, claro está y como es preceptivo que vaya por delante como consecuencia de su alternativa. Esta es sin embargo, la posición de delantero más arriesgada para las dos figuras que dan lustre al cartel, pues se corre el riesgo de que el chaval, a falta de mejores méritos tauromacos, le eche ganas a la cosa, lo cual unido a la sensibilidad y cariño del paisanaje le lleve a mojarle la oreja a los rivales. Si esto ocurre, basta con repetir al chaval al domingo siguiente u ofrecerle una sustitución frente a una ganadería imposible, para que el delantero se estrelle y no se vuelva a oir hablar más de él. Llegado el caso y si esta estrategia no funcionase, se le veta en los carteles y en paz.

La figura del torero por delante que no moleste, no se da únicamente en el ámbito de la tauromaquia. En todas las esferas de la vida, en particular en la empresa, la universidad y como no la política existe esta figura al que se suele denominar como "tonto útil".

Nota al hilo del pitón: Ayer por la noche se conoció la designación de Joan Clos, alcalde de Barcelona, como futuro ministro de industria en sustitución de José Montilla. Al susodicho no se le conoce ningún conocimiento ni experiencia en el sector industrial y su gestión como alcalde de Barcelona está a la vista de todo el mundo.